No soy una emprendedora "nata", ya que me desarrollé por más de 15 años en diversas empresas, trabajando en una variedad de proyectos, tecnologías y países. Pero luego de pasar por grandes, medianas y pequeñas empresas, me di cuenta que necesitaba "algo diferente" y mi camino me condujo hasta acá, que es donde quiero estar.
Claro que no es fácil, tener un buen sueldo cada fin de mes y una estructura que te acompañe es algo que se extraña, pero así como se pierden cosas, se ganan otras. Una de las mejores cosas que me sucedió en este camino, fue conocer a la gente de Emprendedoras en Red, un grupo de mujeres comprometidas con una misión social y de las que aprendo mucho.
Lo más difícil: no contar con la estructura de una empresa y no tener ingresos fijos fueron las cosas que más me costaron. Era muy cómodo llamar a alguien cuando necesitaba un trámite, sacar fotocopias o reemplazarme en una reunión. Tener que hacer todo una, por lo menos al principio y hasta tener ciertos ingresos, es algo a lo que debí acostumbrarme.
¿qué tuviste que cambiar para llegar hasta aquí? Si alguna conociera a la chica de 18 años que quería ser directiva de una gran empresa y me viera ahora, diría que mucho! Pero en realidad sigo siendo la misma persona ambiciosa e idealista, solo que hoy para mi el éxito tiene más que ver con hacer lo que me gusta, poder manejar mis horarios y compartir tiempo con mi hija, que con escalar grandes posiciones.
¿Cuál es tu horizonte de proyección? Espero poder hacer crecer mi emprendimiento, seguir aprendiendo y me gustaría poder crear fuentes de trabajo flexible para mujeres, que nos permitan conciliar la vida laboral y profesional, que nos resulta tan difícil.
¿Qué le transmitirías a otr@s emprendedor@s? Que es difícil, que lleva tiempo, pero lo que cuesta vale, o no?
